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Las lesbianas no queremos tríos

Hace poco conocí a un chico a través de un grupo de ventas. Al principio me pareció simpático; sin embargo, al pasar de los días y con el trato constante, me dijo que le gustaba, pero no me atraía por mi preferencia sexual y porque no suelo involucrarme con personas que apenas conozco. Al principio tomó una actitud de amabilidad, pero no tardó mucho en proponerme un trío con una amiga suya y lo rechace sin más, lo que provocó que se distanciara.

Ahora bien, esta anécdota probablemente es una más para la mayoría de las lesbianas, (desearía que no fuera así) quienes, al aclarar nuestra preferencia sexual, se piensa de inmediato en un trío e incluso, nos lo plantean con absoluta seriedad. No niego que algunas mujeres lo acepten como parte de su gusto sexual, pero al ser una constante, resulta molesto. Yo cuento con más de seis propuestas de este tipo. Tristemente, e l porno, el machismo, la objetivización y los estereotipos juegan un papel importante en la construcción ideológica del lesbianismo en el imaginario colectivo.

En un estudio realizado en España se mostró que cuando la gente piensa en fantasías sexuales, la preferencia, tanto de hombres como de mujeres, es mayor cuando se trata de participar en un trío: 27% para ellas; 47% para ellos[1]. Con base en la evidencia, son más los hombres que fantasean con compartir la cama con dos mujeres (más que con otro hombre), quizá por ello no es de extrañarse que sean los varones quienes más lo proponen. Incluso una búsqueda rápida en el navegador con la palabra “tríos” arroja generalidades relacionadas con lo sexual y experiencias.

Por su parte, los datos indican que “desde la aparición de la internet, el consumo de pornografía se disparó a niveles asombrosos. Por ejemplo, Pornhub, la web porno gratuita más grande, recibió más de 33,500 millones de visitas, solo en 2018” indicá Anne Barr para la BBC News. Si se observa al porno como un reflejo de las fantasías sexuales, es de suponerse el anhelo de concretarlas en la vida real como una experiencia más que permita explorar la vida sexual en pareja, incentivada principalmente por los hombres siempre y cuando la participante sea otra mujer con la cual compartir a su compañera (en la mayoría de los casos).

[1]  Anne Barr, R. (2019, Diciembre 18). Los efectos que tiene en el cerebro consumir pornografía en exceso. BBC News. https://www.bbc.com/mundo/noticias-50837044

Es relevante considerar que el consumo de pornografía desgasta de la corteza prefrontal, la cual es la parte del cerebro encargada de la función ejecutiva y que comprende la moralidad, la fuerza de voluntad y el control de los impulsos, según la especialista Anne Barr. Quizá eso explique por qué las lesbianas podrían ser una opción viable para un trío y con ello que concrete la fantasía impulsada por el porno, en la que dos mujeres gozan de un hombre “gloriosamente”. De ahí que buena parte de las mujeres (bisexuales y lesbianas), se vean obligadas a poner en su descripción de perfil de las plataformas de ligue: cero tríos.

Entendamos que, si bien las lesbianas no estamos obligadas a anunciar nuestra preferencia ante el mundo, ya sea por una cuestión personal o simplemente porque no sentimos la necesidad de hacerlo, imagínense que nos revelemos ante un hombre, y luego a este se le ocurra la genial idea de proponernos un trío a nosotras, a quien apenas nos conoce, y que lo hagamos con otra mujer que no conocemos. Creen que aceptaremos gustosas así casual, por el placer de hacerlo porque somos les-bia-nas, dejando incluso de lado nuestras emociones y sentimientos. De ninguna manera condeno a las mujeres que, sin importar su preferencia, se permitan una fantasía como esta. Cada quien está en la libertad de vivir su sexualidad como mejor le plazca, pero como mujer considero que los sentimientos importantes sobre todo en una entrega tan fundamental como lo es el sexo, en la que debe predominar el respeto, responsabilidad y empatía entre los involucrados.

Suponer que las lesbianas o bisexuales deseamos un trío porque supuestamente está en nuestra naturaleza, es tan absurdo como asegurar que todos los hombres son machistas cuando en realidad la mayoría de las mujeres atraídas por otras, no buscamos una relación de tres, ni de cuatro; ni siquiera nos acostamos con la primera que se nos cruce.

Quizá sea una cuestión en la que el imaginario colectivo influya para tener una percepción distorsionada, donde la lesbiana es una persona accesible a las bajas pasiones y por medio de otra mujer que actúe de anzuelo. Lo que sí, la falta de empatía y educación generalizada se equivoca respecto a nosotras y nos estereotipa como personas entregadas al sexo sin sentimientos, en grupo, y para goce de la pareja que necesita satisfacer su fantasía particular. Mucho debemos hacer para establecer el más alto respeto hacia nosotras. Confiemos en nuestro esfuerzo. La solución el tiempo la dará.

Bibliography

Anne Barr, R. (2019, Diciembre 18). Los efectos que tiene en el cerebro consumir pornografía en exceso. BBC News. https://www.bbc.com/mundo/noticias-50837044

El Clarín. (2018, 03 18). Tríos sexuales: 5 historias de gente que la pasó mal. Clarín, Buena Vida. https://www.clarin.com/buena-vida/trios-sexuales-historias-gente-paso-mal_0_Y8_aZCPjO.html

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Isabel

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Lorem fistrum por la gloria de mi madre esse jarl aliqua llevame al sircoo.

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